Walburga Duranteau

76 años. Jubilada después de 45 años como ginecólogo en Bruselas, Libreville/Gabón y Conakry/Guinea. Ahora participa en la capellanía de emergencia de forma voluntaria. En Conakry pude iniciar la nueva construcción de nuestra iglesia parroquial, la rectoría y una escuela secundaria con la ayuda de la financiación de «Missio» o «Sternsingern» /Aquisgrán]. Miembro de la Federación de Madres de Schoenstatt desde 1972.

¿Qué experiencias me han formado como mujer?

Me conmovió especialmente la situación de las niñas y mujeres en África Occidental. Hasta que se casan, su padre toma todas las decisiones por ellas, y a menudo no le dan mucho valor a una buena educación. Al casarse, se convierte en «propiedad» de los suegros, que en muchos casos explotan su trabajo hasta el límite, esperando que dé vida a muchos hijos.
Las chicas también tienen que pasar a segundo plano – en relación a sus hermanos – en la atención médica, cuando el dinero no es suficiente.

¿Dónde en mi vida he experimentado a Dios?

Después de varios encuentros personales con el P. Kentenich en 1966/67 y sus charlas sobre la filialidad ante Dios, pude descubrir la influencia de Dios en mi vida a diario y me sentí constantemente llevada por él.

¿Qué es lo que veo como EL reto para las mujeres de hoy en día?

En mi opinión, las mujeres deberían (ser permitidas) poder participar mucho más intensamente en la Iglesia y en la sociedad, especialmente en los cargos importantes y en las posiciones de liderazgo. Las mujeres debemos ayudar activamente a llevar a cabo la reestructuración necesaria.

¿Qué quieres cambiar a través de tu vida en el mundo?

Me gustaría seguir trabajando para mejorar la posición de las mujeres y niñas en la iglesia, la sociedad, en todo el mundo.